Estrés Postraumático
Sabías que…
El estrés postraumático es una enfermedad que ocurre luego de vivir o ver eventos traumáticos como las guerras, violaciones, secuestros, abusos físicos, accidentes graves, desastres naturales como huracanes, terremotos. El estrés postraumático hace que la persona se sienta estresado (a) y con temor en todo momento o lugar donde se encuentre luego de pasado el peligro. Afecta su vida, la de sus familiares y la de toda la gente que le rodea.
El estrés postraumático puede provocar problemas como:
- Dificultad para dormir que incluye pesadillas.
- Flashback o el sentimiento de que el evento está sucediendo nuevamente
- Sentimiento de soledad
- Ira
- Sentimientos de preocupación, culpa o tristeza.
- Impotencia
- Depresión
- Melancolía
- Irritabilidad y palpitaciones.
Los síntomas, dependiendo de las características de las personas, llegan a durar de un mes a más y afectan la capacidad de la personas para retomar su vida normal tanto en casa, como en el trabajo, centro de estudio, lugares públicos o en toda situación social.
Prevención
Se recomienda que luego de haber pasado por cualquier evento que pudo haber desencadenado estrés postraumático se reciba apoyo psicológico inmediato. A nivel individual o colectivo los ejercicios de relajación a través de la respiración rítmica son fundamentales para alcanzar estadios de meditación e instrospección que permitan el balance interno. También y no menos importantes son las prácticas religiosas y/o espirituales como orar, rezar, decretar. Todo ello con el objetivo de ayudar a calmar y armonizar el cuerpo, la mente, las emociones para alcanzar estados de relajación, concentración, balance y paz.
Para romper el ciclo de los problemas que ocasiona el estrés postraumático se requiere de determinación, _solamente la persona afectada puede dar el primer paso_, autodisciplina, propósito, convicción, apoyo en personas o centros para el “arranque” mientras adopta la rutina que represente el bálsamo para su vida, cuerpo y alma.
El recordar con miedo los eventos post traumáticos, pérdidas, duelos, impotencia y otras formas de dolor vulnera la capacidad de conexión espiritual, recuperación mental y física, retrasando la capacidad de obtener la energía pura del universo para seguir adelante con renovados propósitos. Es fácil escribirlo pero requiere de mucha fuerza interna para avanzar. La familia, las personas alrededor son claves para el proceso, sin presión ni reproche.
Una buena alimentación, la realización de actividades creativas, el ejercicio y un buen descanso, son la clave para vencer esta situación. Se recomienda, en la medida de lo posible, realizar ejercicio al menos 30 minutos. Se pueden presentar estados de desgano, apatía, para cada una de estas iniciativas u otras, pero requiere de voluntad, fuerza y volver, volver a intentarlo.
Concluir que el apoyo de la familia es fundamental, por lo tanto la terapia familiar ayudará al que padece de estrés postraumático a comunicarse con sus seres amados, hacerle frente a sus emociones y sentimientos pero sobre todo a mejorar la relación de convivencia con la familia, pilar de la sociedad. Hoy en día contamos en internet con innumerables consejos, prácticas en videos para conocer los que otros ya vivieron. Y en el plano de la forma con personas y centros interesados en colaborar.